jueves, 28 de enero de 2010

Observamos formas que no podemos describir

Observamos formas que no podemos describir

En la soledad del laberinto mundo,
Queremos huir hacia el extremo más alejado

Las formas que no se describen se conectan
Atacadas por un extraño mal nocturno

Nada esta más allá del bien
Todo esta más allá del mal

Somos formas y villanos devorándose
Mientras el amanecer del nuevo día
Nos otorga el llanto de las primeras nubes

Somos formas y villanos
Soñando en un rectángulo de amebas

Somos sangre,
Un par de gotas de sangre huyendo
Hacia ese extremo antes concebido

La niebla impregna y da sentido

En el mundo laberinto los hombres
Se acercan cada vez más al dolor mediatico

Somos formas calcinadas
Por el tiempo que no espera
A los villanos,
Que se desnuda
En el crepúsculo
Y así sigue hasta el otro día