jueves, 28 de enero de 2010

Observamos formas que no podemos describir

Observamos formas que no podemos describir

En la soledad del laberinto mundo,
Queremos huir hacia el extremo más alejado

Las formas que no se describen se conectan
Atacadas por un extraño mal nocturno

Nada esta más allá del bien
Todo esta más allá del mal

Somos formas y villanos devorándose
Mientras el amanecer del nuevo día
Nos otorga el llanto de las primeras nubes

Somos formas y villanos
Soñando en un rectángulo de amebas

Somos sangre,
Un par de gotas de sangre huyendo
Hacia ese extremo antes concebido

La niebla impregna y da sentido

En el mundo laberinto los hombres
Se acercan cada vez más al dolor mediatico

Somos formas calcinadas
Por el tiempo que no espera
A los villanos,
Que se desnuda
En el crepúsculo
Y así sigue hasta el otro día

sábado, 23 de enero de 2010

miércoles, 20 de enero de 2010

Relojes

Espero que no olvides
tu condición
permeable a la muerte,
un Dios de suerte perecedera

Espero que el infinito
te condene a las celdas de la nada
y que provoque en ti
la misma incertidumbre del devenir

Espero que el silencio
al fin devore tu materia
y te deje obsoleto
y sin posibilidad de redimirte

Espero que sin tus demonios
esperar sea en vano
pues la espera ya no sería.

domingo, 17 de enero de 2010

“Luego, la naturaleza”

Luego, la naturaleza
Devoró las anécdotas,
La ciudad se sumergió, espantada,
En el diurno y solitario,
Histórico mar de la memoria,
Olvidando las raíces
De su génesis.
Infierno para algunos,
Paraíso exclusivo para otros,
Los hombres sin piel
Se atrevieron a salir de sus escondites,
Quemaron espermas,
Inseminaron tierras desconocidas
Y nacieron hijos
Con árboles y música,
Ideas eternas,
Formas representadas
(la raíz fue la proyección
de un tren sobre una tela
intacta).
Y un Dios espectador
Los bautizo sonriente,
Magnifico
Y se hecho a contemplarlos
Exhausto.

Años

Ser la piedra
Que le entrega al viento
Su alma

viernes, 15 de enero de 2010

Flores marchitas en primavera

¿En que pensas?
Pero Juan ya no pensaba,
Le dictaba a su mano
Palabras,
Pulsos,
Estremecimientos,
Que se hacían y se deshacían en el papel
Y volvían y se revolvían
Fastidiados por la arbitrariedad
De aquella mente sumergida
De aquel,
El de los castillos, los laberintos y las princesas
El asesino,
El ausente.
Pero Juan no se reía,
Sentía pena por aquellos personajes
Que se le escapaban de las manos
Que se petrificaban en un rastro de dolor,
Y la alegría también se le fue de las manos
Y salió a recorrer las calles, los cementerios,
Luego las habitaciones de las amadas,
Los jardines de amapolas,
Y Juan se sintió lejano,
Extraño e invadido
Y luego solo, triste
Y enfermo.
¿En que pensas?
Pero Juan ya no pensaba,
Le dictaba a su mano
Flores marchitas también hay en primavera

martes, 12 de enero de 2010

Fragmentación de las sombras

Siento el frío del océano besar melancólico
Las orillas de esta playa,
Veo personas cruzar frente a mi ventana transpirada
Y el sol, sin prisa, se oculta en el agua.

Las olas dibujan rompientes y peñascos
Y sonidos desgarrados de mar intranquilo,
La noche observa una fogata
Y castillos de arena que juegan
A ser de verdad.

Las sombras, arrojadas a los mansos
Revuelos del tiempo,
Son plenamente conscientes del fin,
Y como vos y yo
Se alejan cada vez más
Y se quiebran en el horizonte.

La pleamar vino a apagar la fogata,
Las olas se tomaron un respiro,
La gente dejó de caminar por aquí,
Ya no está el sol, ni la noche,
Los castillos de arena se derrumbaron,
Eran de mentira.

Vos y yo, como fragmentos de sombra
Como fragmentos de horizonte
Desparramados en la playa
Esperando ser absorbidos

domingo, 10 de enero de 2010

Una elección simple


Algunos seres son intransigentes,
otros, tan solo transferencia.
vos y yo
elegimos ser carne de un mismo barro,
y con eso nos basta.

Terrenal



Y en este perfecto instante,
en el limbo,
los ángeles de la mansedumbre
colisionan entre sí
alentados por un cosquilleo de otra historia olvidada.

Tus susurros hacen mella en sus alas
y así caen,
respondiendo a una extraña fuerza magnética
que los devora
hacia el centro mismo de la tierra.

viernes, 1 de enero de 2010

Comienzo

y de repente
la piel que antes tiraba
ahora
se afloja
se afloja
se desprende

En el principio, una piedra
en el fondo de un oceano
profundo

¿alcanzas a trarmela antes de que el tiempo se vuelva piedra para mí?